Difícil de decir adiós

Los nuevos retos profesionales traen consigo a parte de la expectativa, emoción y cierto nerviosismo; un poco de nostalgia, tristeza y añoranza de lo que se queda atrás.  Aún logro recordar el día de la entrevista en Maresa (ensambladora de autos), estaba cansada de esperar y hacía un calor terrible, típico de la mitad del mundo.

Cuando por fin me entrevistaron, los dos hombres sentados en la sala se veían extremadamente serios, después de varias preguntas de rigor y de  hablar con el que sería mi jefe, acerca de mi experiencia anterior en otra de las ensambladoras del país donde el también había trabajado, típico "te llamaremos".  Sin duda después de una semana exacta me llamaron (sabía que lo lograría).

No se si es por mi tono de voz, la melodía que creo al pronunciar cada palabra, o la mirada fija, penetrante y dura que creen que poseo, pero en todas las entrevistas me va bien! Dicen que poseo una seguridad extrema al hablar, así sean piedras!!!

Maresa fue sin duda la mejor experiencia laboral que he tenido!!! Y me duele dejarlo, dejar a mi jefe que desde que me conoció puso su total confianza en mi, a mis compañeros que hicieron que día a día no pueda esperar por ir corriendo a trabajar!!! Extraño tanto a Pablo (si mi ex, el que me rompió el corazón y bla bla bla (ese cuento será en otra ocasión))... Incluso extraño mi tasa de café!!!

Bueno al mal tiempo, (ni tan malo), buena cara.  En mi actual empleo estoy de un lado para el otro, es una empresa de la Corporación Maresa Holding también, que se dedica a la venta de motos, repuestos y accesorios Kawasaki!!!  Les hago toda la logística y el comercio exterior!!!  Todo un reto, pero feliz de escalar cada vez más y más alto!!!